LA INTUICIÓN NUNCA ME FALLA EN EL AMOR
En el despliegue del
juego de seducción con el otro es donde vamos marcando las pautas de
futuros encuentros y nos dejamos llevar por un tinte nacarado llamado
intuición, donde la mirada se difracta al atravesarlo y nos ofrece
una visión más o menos acertada de lo que creemos que puede o no
puede ser. ¿Pero hasta dónde habremos de dejarnos guiar por la
citada intuición? Sabemos desde el psicoanálisis que puede ser un
arma de doble filo porque hay en nosotros deseos inconscientes que
pueden hacer que amemos a quien nos hace sufrir, a quien nos reafirma
una ideología que persiste en nuestra vida y de la cual padecemos
(como que todos los hombres o mujeres son iguales, sólo quieren
una cosa, si no me hace esto, es que no me quiere, si está para ti,
pase lo que pase aguantará...), en definitiva lo que a veces nos une
al otro es el lazo invisible de nuestro propia síntomatología. Las
relaciones, como todo en el ser humano, no están ya hechas, sino que
se producen, se sustentan en la construcción, no en la intuición,
esto forma parte más de un plan guiado por nuestro inconsciente que
de algo real. En lugar de sobreactuar con un guión aprendido, es
entre bastidores, con las luces apagadas para evitar que la mirada
de nuestros fantasmas ocultos obstaculicen y guien nuestra engañosa
percepción de la imagen del otro, donde las palabras marcarán las
pautas, el sentido. Así podremos cambiar nuestro decorado en el
escenario de la vida y ser el actor de otras historias ¿por qué no? con final feliz.
Laura López,
psicóloga-psicoanalista
Laura
López psicóloga-psicoanalista
lauralopez@psicoanalistaenmalaga.com
610865355
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