CUANDO UN HIJO NO ES UN HIJO

Hay ocasiones en las que los padres, en su intento por educar, son demasiado protectores, un amor excesivo cubre cualquier demanda. Es un momento para reflexionar porque si no le dan la oportunidad a que se equivoque, que pruebe caminos...así jamás se despegará de sus faldas. Se avanza por el error, la desilusión es necesaria, porque entre lo que espera y lo que se encuentra, ahí se va generando la inteligencia, el deseo.

Una madre se quejaba de que su hijo se equivocaba, que se tenía que espabilar, que no sabía hacer nada solo... Su hijo tenía 18 años y en tan sólo unos diez minutos vi cómo hablaba continuamente por él, lo interrumpía, le regañaba y lo ridiculizaba delante de quien presenciaba la escena.¿Hay una escucha activa? Más allá de las necesidades,del amor (si ha comido, si tiene novio/a...), atender al deseo: hay una persona que demanda pronunciarse, perfilar sus gustos, sus decisiones... Es importante el concepto de PERSONA, un hijo no es algo suyo, es un proyecto de vida, que necesita que lo acompañen. Son cuestiones que tienen que ver con el progenitor o los progenitores, más allá que su hijo sea un poco tímido, o como diría usted “despistado” (ya sabemos que los despistes no son casuales, son actos llenos de sentido). A veces se “utilizan” a los hijos como tapadera, para no hablar de ciertas cuestiones que tienen que ver con uno mismo, puede querer llegar a convertirlo en una prolongación suya, debido a frustraciones que arrastra, sentimientos de culpa, y que pretende que a través de su hijo se resuelvan. Niños “grandes”, en los cuales no se corresponde la edad cronológica con la mental, un bajo umbral de frustración, una dependencia extrema, miedos, inseguridades... Son hombres y mujeres del futuro que algún día tendrán que contribuir a que el mundo sea más justo, con igualdad de oportunidades y donde poder transformar la realidad a través del trabajo, de acompañarse por otras personas...si no ¿qué mundo construiremos? Nadie está vacunado contra la vida, todos hemos de construir nuestro camino y si lo detenemos a cada paso el camino caerá bajo sus pies.

Laura López psicóloga-psicoanalista

Telf.: 610865355

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